En la pieza
de Renta Trejo que abre esta
muestra, el textil es usado, de una manera simbólica, en su condición de indumentaria
de identidad de una comunidad. La obra a través del contexto de esta muestra,
que se presenta en dos lugares, La Alianza Francesa y el Museo de la Ciudad, también
refiere a la conexión entre pueblos; así alude a una reconfiguración de enlaces
en el mundo para una nueva indumentaria o apariencia; más allá de las
categorías depredadoras de la economía capitalista, de primer y tercer mundo,
esta nueva conformación, que propone Renata, deriva hacia una identidad social
basada en los principios naturales, que además de ser la base de nuestra
existencia es la nueva-futura riqueza global.
Alberto
Ruiz con su tapete, también encauza la reflexión al sentido del mundo como
un entramado entre fibras naturales y sintéticas, que en este caso son
recicladas. La pieza esta tejida con bolsas de basura usadas y restos de hilos
de tapetes.
Emilia Sandoval con sus
dos gráficas engaña a nuestra vista. Con la digitalización, ampliación e
impresión de invitaciones para exposiciones de arte en París, obtenidas de su
más reciente viaje a la capital francesa, bordadas en el original, nos remite a
cuán sencillo en el mundo de hoy, es que lo que vemos sea una indeterminada
verdad/falsedad.
Mónica Iturribarría con agudeza y delicadeza nos enfrenta a un cruce de sentidos entre lo social y lo personal. En un pañuelo, accesorio muy personal, casi íntimo, borda imágenes de la delirante narco-cultura. Usa puntadas del mas fino dechado de virtudes, a la usanza de nuestras abuelas, para con ello plantearnos la nueva dimensión de lo doméstico: La violencia del narcotráfico que ya esta en demasiados hogares mexicanos.
La obra de Alan Sierra es un reto para quien la observa en un contexto textil
convencional, pero si la asocia al sentido de fibras y entramados, también
propuestos en esta exposición podrá disfrutarla. Esta muestra es una de las dos
que presenta Alan, la otra esta en el Museo de la Ciudad. Ambas refieren a la
conexión de identidad de un pueblo que conllevan los espacios del Museo y la
Alianza. En el caso de Franja es la parte que comparten las
banderas de México y Francia; una abstracción del blanco, su festividad absurda
y referente a tantas asociaciones personales, puesta en evidencia en objetos
genéricos.
Cesar Castillo bordó la frase “… y yo
seré la mamá solapadora”, que escucho de manera azarosa en la conversación de
unos novios adolescentes, pero que llamo poderosamente su atención. Con la
formación científica que César tiene, lapidaria e ingeniosamente, desentraña la
psique social que carga a la familia mexicana, ¡sí, es escalofriante!
Jaime Ruiz evidencia otras fibras sociales,
con sencillez utiliza la esencia de los materiales de la obra para dar una
sintética reflexión. Con la una criba de un albañil que se utiliza para la
construcción, edifica la oración de su pieza: El desplazamiento, en el mundo de
hoy, del sistema manual de trabajadores y artesanos, es un hilo natural, ¡observémoslo!
Pablo Llana recicla el desecho del
consumismo, a través de usar las envolturas de productos industrializados, como
la bolsa de los alimentos chatarra, para resignificar el textil oaxaqueño. Las
imágenes que sus obras tienen son estampas de textiles tradicionales de
diferentes regiones de Oaxaca, del Istmo, de la Sierra Norte, del Papaloapan y
de la Sierra Sur. Con ello Pablo une a al país, de su tierra natal Tijuana con
Oaxaca, porque ambos lugares tienen en común los productos industrializados.
Y Joao Rodríguez en sus gráficas
evidencia las posibilidades de las fibras como elementos visuales; sus
posibilidades de reproducción, casi infinitas, así como su conexión natural en
árboles y piedras, tanto como con nosotros, que somos un textil vivo hecho de
tejidos, como el óseo, epitelial, así como de fibras sociales que nos animan y
mueven como comunidad.
Tejidos Urbanos
durante la inauguración de esta muestra y la de la Alianza Francesa,
realizaron la intervención en el espacio con tejidos, que a manera de
telarañas simbolizan el destino. Su participación en esta muestra es con
intervenciones públicas, en las que en puntos simbólicos de la historia
de la ciudad, colocarán tejidos grises o blancos, que serán gestos de
lo que obscuramente ha tejido el destino de la comunidad y lo que con
claridad ellos vislumbran como puntos o lugares que se tejen como un
futuro destino.